Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

Destrucción, abandono y habitación de «okupas» (s. XIV-XV)

La residencia real de Tiebas fue destruida durante la guerra con Castilla en 1378 por las tropas castellanas comandadas por Pedro Manrique. El incendio que destruyó el conjunto palaciego queda perfectamente atestiguado por sus huellas perfectamente visibles en los paramentos. Así, se distinguen manchas rojizas, agrietamiento y desconchamiento parcial de muchos de los sillares producidos por la exposición a altas temperaturas.

El conjunto debió quedar abandonado ya que no hay ni una sola mención documental referente a reparaciones, arreglos, etc. que menciones que el edificio estaba en uso, aunque seguía sien patrimonio regio. Sin embargo, la documentación arqueológica ha puesto en evidencia que en un momento entre finales del s. XIV y la 1ª mitad del s. XV, una parte del edificio principal estuvo habitada, seguramente de forma clandestina, es decir, que se trataría, sencillamente, de “okupas” medievales.

Uno de los nichos, el tercero a partir de la escalera, fue transformado para albergar en su interior un área de cocina: se desmontó el enlosado, se acondicionó el suelo, se colocaron bloques de arenisca trabados con tierra en los laterales de la entrada para formar un estrecho paso (0’5 m). Al fondo de este reducido cubículo se construyó con fragmentos de tejas planas superpuestas, trabadas con argamasa, un soporte  que bien pudo conformar una base donde disponer una parrilla o asador. Una gruesa capa de cenizas probaba que toda esta área sufrió una intensa exposición al fuego.

Asociado a esta estructura se halló un buen número de vasijas pertenecientes a producciones domésticas de burdo acabado, probablemente locales, de época plenomedieval. Aparecieron ollas de cocina, un tarro de almacenamiento y vasijas para el servicio de mesa, como  jarritas, fuentes y platos.